Una recuperación económica consolidada y una expansión del 3,5% del PBI anual impulsarán al alza a casi todos los sectores de la economía, aunque no de manera homogénea para el año próximo.
La industria automotriz con el 10,7%, la construcción con el 8; la ganadería con el 7,4; los electrodomésticos (venta) con el 7; la siderurgia con el 6,9; los agroquímicos (consumo de fertilizantes) con el 6,7; la minería (exportaciones) con el 6,4 y los cueros con un alza del 4,5; son los sectores que exhiben los indicadores más dinámicos para 2018, de acuerdo a las estimaciones que ABECEB dio a conocer hoy.
Anticipando un año con indicadores también positivos, se presentan los laboratorios con un aumento en las ventas del 3,5; la producción de madera con 2,8; la de petroquímica con el 2,7; la venta de calzado con el 2,5; la generación de energía eléctrica con el 2; la producción de alimentos y bebidas y la higiene personal también con el 2; y la textil, con un incremento del 1,5% anticipan un año positivo, aunque no con la agilidad de los mencionados anteriormente.
En líneas generales, los sectores más dinámicos son los mismos que cerrarán este año con las mejores performances en sus indicadores clave: los agroquímicos terminarán 2017 con un alza del 11,4; la construcción con el 10,8; siderurgia con el 7,4; electrodomésticos con el 6,1; automotriz con el 3,5; ganadería con el 5,8 y cueros con el 13,4% de mejora.
En lo que hace a las bajas, durante 2018 la más pronunciada será la producción de biocombustibles con se contraería 11%, producto del cierre del mercado estadounidense, que impactaría en mayor medida que la apertura en Europa, aunque la potencialidad del sector por insertarse en nuevos mercados permanece latente. La producción de petróleo también exhibirá guarismos negativos con una caída del 2,3 durante 2018, pero recortando la baja del 6,6 prevista para este año ya que, más allá de la liberalización de los precios internos, los valores no bastan para reimpulsar la inversión. En gas, el crecimiento se retomaría en 2018, sobre la base de recursos no convencionales, que compensarán la caída en los tradicionales.
Los sectores más destacados
La construcción seguirá siendo uno de los motores de la economía. La obra pública es prioridad para el gobierno que prevé inversiones por 436.00 millones de pesos (incluye gasto de capital e inversiones vía régimen de participación público-privada). El crédito hipotecario continuará apuntalando la construcción residencial: el stock de préstamos a tasa ajustable UVA ya llega a AR$ 27.500 millones desde su implementación, y seguirá creciendo. El crédito hipotecario es 0,3% del PBI y tiene margen para alcanzar el 4% (incremento del stock de más de diez veces).
La automotriz consolidará el mercado interno en niveles superiores a las 900 mil unidades, favorecido por la competencia entre marcas, en tanto los patentamientos se encaminan a otro año próximo al record histórico de 2013. La producción continúa motorizada por las exportaciones, principalmente a Brasil y favorecida por la puesta en línea de los nuevos lanzamientos.
Por su parte, la actividad siderúrgica continuará expandiéndose como consecuencia de una demanda firme de la construcción, la metalmecánica y la automotriz. Por el lado externo, la tendencia alcista en el precio del petróleo favorece las ventas externas de tubos para la industria petrolera.
La minería se prepara para un buen 2018. Ese año comenzarán a producir Lindero, Chinchillas y San Nicolas. Junto con el desarrollo de los salares se prevé que las exportaciones de minerales aumenten un 6,4% respecto a 2017, mientras que a 2021 se espera que las exportaciones de litio se tripliquen en línea con un aumento de la demanda global. Las perspectivas a futuro son alentadoras: este año aumentarán las exploraciones un 2% respecto al año anterior.
En tanto, la producción textil ha empezado a atenuar su tendencia negativa, debido a las menores bases de comparación, al tiempo que se espera que en los últimos meses del año comience a mostrar variaciones positivas. En lo que va del año, la industria textil ha sido la de mayor retracción con una caída del 12,4% interanual, que se explica por caídas tanto de hilados de algodón (-19,9%) como de Tejidos (-9,5%).
En lo que hace a los laboratorios, la consolidación del mercado interno permitirá una recuperación de la producción, junto a un incremento de las importaciones. El gobierno se comprometió a reglamentar la Ley de Promoción del Desarrollo y Producción de la Biotecnología Moderna, sancionada en 2007 que prevé diversos beneficios impositivos para proyectos de investigación y producción en biotecnología y la creación de un Fondo de Estímulo. El anuncio fue en el marco del Acuerdo Productivo con el sector privado, que se comprometió con inversiones de 670 millones de dólares y aumentar las exportaciones a 450 millones de dólares para el período 2017-2019.
Por último, los electrodomésticos mejoraron las perspectivas de crecimiento de ventas, producto de una recuperación en el poder adquisitivo del salario. El aumento de los créditos hipotecarios y por lo tanto de la construcción, impactará positivamente en las ventas de bienes con mayor ciclo de renovación y que hacen al equipamiento de viviendas (como es el caso de heladeras) . No obstante, la producción de estos bienes mostrará resultados dispares, en línea con las diferencias de productividad que exhiben los productos de línea blanca y la línea marrón en un contexto de mayor apertura, la cual afecta más a estos últimos.